jueves, 27 de octubre de 2022

9 Entre el verde nuevo

Entre el verde nuevo de las hojas más altas del naranjo del patio, brilla el cuerpo negro, estilizado, de un mirlo joven.

Con su pico amarillo corta una flor de azahar y vuela hacia una antena cercana, donde ella posa, coqueta, como ausente.

Nerviosamente agita él los tiernos pétalos blancos alrededor del cuello de ella, hasta que al fin suelta la flor y los pájaros comienzan a frotar sus picos.

Al cabo, él entona su garganta. Ella acompaña.

Ahí siguen, en la antena. Emitiendo al mundo en horario de tarde la maravillosa fragancia de su música.

De su amor.


martes, 25 de octubre de 2022

8 Invitación al silencio

El gorrión, inmóvil allá en lo más alto del álamo desnudo.

La corona blanca de la luna sobre los olivos.

Las siluetas de las casas recortándose negras sobre un cielo azulón.

Los almendros. Su flor. Su dulce perfume...

Hasta las campanas de la iglesia tañen a silencio en este anochecer.


viernes, 21 de octubre de 2022

7 Ciclos

 La niebla. El frío. La helada en los tejados, en las piedras, en la hierba de las cunetas, en los sembrados.

Y poco a poco alzándose naranja el sol detrás de las sierras, su cálida lengua licuando la rociada.

Y de nuevo los campos verdes, brillantes, como recién llovidos.


martes, 18 de octubre de 2022

6 Mientras leo

 Mientras leo unos versos de Ezra Pound descubro, como si llevara un rato al acecho, emboscada, el reflejo de una media luna amarilla en el cristal rojo de la mesa.

Levanto sorprendido la cabeza y miro por la ventana, y me voy tras las negras siluetas de los pájaros que revolotean por los tejados y por las copas de los olivos, sobre el fondo de rosas que el sol envía desde su ocaso.

Versos.

Luna.

Luces.

Vuelos.


jueves, 13 de octubre de 2022

5 La tarde

 Silenciosa, envuelta en grises se despide la tarde.

En la habitación en penumbra arde una vela de sutil aroma a azahar.

La llama se eleva inmóvil hacia las sombras: fuego eterno de la verdad, luz consoladora de la poesía, fulgor deslumbrante de la belleza.


martes, 11 de octubre de 2022

4 La luz

 La luz limpia, refulgente, de las estrellas en el cielo negro de noviembre.

Duerme el pueblo.

Silencio.

Poco a poco, luz a luz, la noche se va apagando.

Clarea. 

Solo Venus resiste con su brillo azul.

Y el trazo apenas de la luna en creciente.


jueves, 6 de octubre de 2022

3 El agua

 El agua, mansa, no el violento turbión de la tormenta que descarna las raíces; serena lluvia que empapa, que ni arrambla ni destruye, sino fecunda y vivifica.

miércoles, 5 de octubre de 2022

On the hill

 Vivíamos todavía en el Campo de la Verdad. Mi tío Rafael acababa de llegar de Inglaterra y me pidió que le trajera la maleta del coche. Cuando abrí el maletero, flipé, nunca me habría esperado eso de él, que era el hombre de confianza de Esteban Orbegozo y andaba siempre de viajes por Europa, buscando mercado.

El fondo del maletero del Mercedes granate estaba cubierto de discos de 45 r.p.m. de música inglesa. Ojalá tuviese un padre así.

Cuando llegué a casa y le dejé la maleta en la habitación, no pude resistirme. Le pedí permiso para coger un par de discos. Y es lo que hice, solo dos: el Magical Mystery Tour fue el primero; luego me decidí por otro con «Paperback writer», «Rain», «The Word» y «Nowhere man». Todavía recuerdo los comienzos y los estribillos. Los dos discos, tres en realidad, porque MMT era un doble, acabaron gentilmente en manos de dos coleccionistas de vinilos después de muchos años, cuando lo digital. No me arrepiento. Hay que compartir el placer.

Escuché esas canciones cientos de veces, primero en un pick-up y luego en un tocadiscos compacto, de aquellos en que la cubierta era también altavoz.

El del Magical Mystry Tour era un libreto con fotografías. Me encantaba. Pasaba ratos y ratos mirando las fotos. Imaginando. Poniendo una y otra vez mi canción favorita: Day after day alone on the hill… Maravillosa, soñadora, con su ironía y su sabiduría, con su loco allá en lo alto de la colina, incomprendido, al que nadie presta atención.

Como muchos otros, al loco de la colina de la radio empezamos a conocerlo en los años ochenta. Descubrí entonces que Jesús Quintero era el protagonista de mi canción favorita: un buen tipo que saca la mejor versión de los demás. Un periodista como hay que serlo.


martes, 4 de octubre de 2022

2 Resisten

Resisten con su viejo corazón los embates del invierno y del ardiente agosto.

Guardan imágenes del trasiego de gentes hacia el norte y hacia el sur, el acento de lenguas remotas, la voz de olvidados dioses y reyes en la nada silenciosa ahora, en el polvo que se arrastra de cerro en cerro.

Memoria de asolados esplendores, de arroyos caudalosos, de lluvias generosas, del relámpago y del rayo que desgaja las ramas y las devuelve carbonizadas a la tierra.

Viejas encinas, nobles chaparros, dueños indiscutibles del territorio.

Recia escritura vegetal que resiste paciente, orgullosa.

En sus copas el viento se hace canción, rústica melodía.

En el corazón viejo de las encinas late rítmica la sangre del tiempo.